6 de marzo de 2011

¡Mira que guapo iba mi chico...!

Una de las cosas mas extrañas del mundo son los Carnavales, si, es muy extraño.
En mi colegio siempre se han celebrado, y cada año nos vestiamos de algo diferente.
Recuerdo que me disfrazé de pera en infantil, tambien de arcoiris(que se me cayó chocolate encima del disfraz)pero de pera mola mas.
Luego cuando pasamos a primaria ya era algo mas raro todavia.
De rusos. RUSOS.
Doy un salto en el tiempo, 5 años, para ir mas rapido.
Llegamos a sexto y es una tradicion disfrazarse de hippies o macarras. Yo fui de macarra. Me enfunde mi chaqueta vaquera, me hice unos 'pirsin' con papel albal y me hice una cresta. Si señor. ¡Que pena daba! Tambien en todos los carnavales se hacen bailes, por lo menos en mi colegio, y lo digo desde aqui: eran una puta mierda. Que si el balie de los 7 saltos, que si una jota, ya ves, una jota disfrazados de macarras, no podiamos cantar algo de Grease, no, una jota.
Y lo que menos me gusta en los carnavales son las fotos. Que si ahora ponte con las chicas, que si ahora con tu mejor amigo, ahora ponte haciendo de ruso. NO MOLA. Y menos mola que luego cuando venga la familia a casa tu madre saque una foto en papel de ti disfrazado y diga: Mira que guapo iba mi chico.En fin, los carnavales perdieron su gracia cuando todos los años en Rio de Janeiro(Patricia Conde, no, no es de Humberto Janeiro) las mujeres salgan iguales. Despelotadas y de amarillo con flecos.
Un beso.

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